4 posturas que no pueden faltar en tu práctica

4 posturas que no pueden faltar en tu práctica
By: Gaia Staff | Nov. 25, 2014
El yoga tiene muchos estilos: vinyasa, iyengar, kundalini… lo que permite que cada persona pueda practicar yoga con el estilo que mejor se adapte a sus preferencias y condición física. De la misma manera, cada práctica se puede orientar hacia un objetivo concreto: yoga restaurativo para dolores menstruales, para el dolor de cabeza, para mejorar la vida sexual, para fortalecer la espalda, para mejorar el tono muscular en las piernas, para alinear los chakras y equilibrar la energía… podemos darle el enfoque que queramos.
Pero hoy vamos a abarcar las cuatro posturas que no pueden faltar en tu práctica diaria, sea el estilo que sea o con el objetivo concreto que te hayas marcado.
1-. TADASANA (Postura de la montaña)
Nos invita a erguirnos con la majestuosa estabilidad y firmeza de una montaña. Es la postura de pie básica, el punto del que partiremos y al que regresaremos mientras exploramos los aspectos más dinámicos de la práctica.
Mejora el equilibrio y ayuda a corregir malas posturas. Fortalece y tonifica todo el cuerpo.
2-. ADHO MUKHA SVANASANA (Postura del perro mirando hacia abajo)
Recuerda a un perro que estira completamente tu cuerpo. La columna, los tendones de la parte posterior de la rodilla y los hombros reciben un beneficioso estiramiento. Además la posición invertida de la cabeza aporta mayor riego sanguíneo a la cabeza, por lo que ayuda a mitigar la depresión, calma los estados de ira y enfado y nos devuelve a la sensación de centro y unidad del cuerpo.
En este enlace te damos todas las claves para realizarla correctamente.
3-.BALASANA (Postura del niño)
Esta postura no puede faltar en tu práctica: aporta descanso, restablece el equilibrio y la armonía del cuerpo. Conduce a la mente hacia un estado de apertura y receptividad. Es ideal incluirla entre una o más posturas de gran intensidad y dificultad o de extensión de columna, como: el saltamontes, el arco o la cobra.
4-. SAVASANA (Postura del cadáver)
Tumbarte en el suelo con los ojos cerrados permite que todo el cuerpo se relaje. Al principio, nos puede resultar tremendamente difícil, porque nuestra mente inquieta no consigue descansar y ello nos distrae de la paz que nos ofrece el cuerpo cuando alcanza la relajación profunda. Con práctica, mente y cuerpo se irán distendiendo con mayor facilidad.
Si quieres practicar estas posturas básicas y sentir la coherencia de los movimientos del cuerpo al pasar por ellas, te invitamos a esta práctica de nuestro profesor Mario Silva. Únete a Aomm.tv y disfrútala.
La práctica de yoga

La práctica de yoga se adapta a las estaciones, porque todo cambio cíclico nos afecta física y anímicamente más de lo que creemos.
La primavera es una época bellísima pero también un momento de transición. Después del recogimiento invernal el cuerpo pide a gritos abrirse de nuevo, salir al exterior y llenarse de luz. Igual que un brote, renacemos para empezar un nuevo periodo de expansión.
Purvottanasana
Purvottanasana significa estiramiento intenso del “Este”, asociado a la parte frontal del cuerpo en toda su extensión, desde de los dedos de los pies hasta la cumbre de la cabeza. Purva/ el Oriente, Ttan/ estiramiento. También se conoce como postura del plano inclinado boca arriba.