Es nuestro subconsciente quien elige a nuestra pareja por nosotros
“Me emocioné al darme cuenta de que podía cambiar el carácter de mi vida cambiando mis creencias”
-Bruce Lipton-
Solamente un 5% de nuestra mente es consciente, el otro 95% restante es subconsciente. Es decir, la mayor parte de nuestros pensamientos, emociones y comportamientos, están fuera de nuestro control, son automáticos, inconscientes.
Sin embargo vamos por la vida creyendo que somos nosotros de forma autónoma quienes decidimos qué religión nos llama, qué preferencias políticas tenemos, qué equipo de fútbol nos gusta, qué literatura nos nutre más o qué tipo de hombre o mujer nos atrae hasta el punto de querer tener una relación con esa persona.
Nada más lejos. Hasta la elección de nuestra pareja es algo condicionado por nuestras experiencias anteriores. Esas experiencias, sobre todo las que hemos vivido entre los cero y los siete años de edad que es cuando se configura la mayor parte de nuestra mente subconsciente, son de las que extraemos las creencias que nos empoderan o nos limitan el resto de nuestra vida.
EL PODER DE LAS CREENCIAS
“Lo que crees es lo que creas”
-Bruce Lipton-
El primer paso para adquirir nuevas creencias que sustituyan a las antiguas que te limitan, es tomar consciencia de qué situaciones se reproducen en tu vida a partir de patrones recurrentes.
Y no solamente en tu propia forma de pensar y comportarte, sino que también se trata de ver en qué personas de influencia en tu niñez, se han dado, y observar qué formas de pensar y actuar han tenido que tú también has incorporado a tu vida y tu forma de ser. Porque tienes que comprender que hay mucho de ti que no es tuyo, te guste o no.
Descubrir que el 95% de tu identidad está formada por un conjunto de creencias que has adoptado de otros puede resultar inquietante, es cierto. No somos quien creemos que somos, en realidad, incluso cuando mostramos comportamientos contrarios a nuestros padres porque los de ellos no nos agradan, también estamos siendo influidos por ellos.
En cualquier caso esto se acepta y no es lo más relevante, así es nuestra naturaleza. Lo que sí que es importante es si esa información que reproducimos nos complica la vida, o nos la hace más feliz.
Te comparto uno de los capítulos de la serie “La gran convergencia” donde el Dr Bruce Lipton nos desvela la importancia de las creencias y cómo nos condiciona nuestro entorno, más allá del mapa genético, sobre todo en la niñez.
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La re-programación mental consiste en cambiar el programa, tu software, para que tengas la autonomía mental para ser, hacer y tener lo que realmente tú deseas.
Tal vez puedes seguir haciendo aquel gesto que era tan propio de tu padre, o conducir siempre muy pegada al arcén como hacía tu madre, pero lo haces porque tú lo decides una vez has tomado consciencia de ello. Y sobre todo porque no te perjudica, porque si así fuera, seguramente tratarías de cambiar esa creencia ahora que lo sabes.
La toma de consciencia implica atención, alerta, poner el foco en aquello que estás buscando. Cuando empieza la introspección, la observación de ti mismo de forma objetiva -como si fueras un espectador de tus pensamientos y tus actos-, empiezas a comprender muchas de las cosas que te han pasado y de los comportamientos que has tenido.
Es un ejercicio de toma de distancia respecto de uno mismo. Es adquirir perspectiva de quién eres, verte y ver a las personas que han podido influirte; ahí empieza la toma de consciencia.
Cuando tienes perspectiva puedes ver muy fácilmente qué patrones han coincidido siempre en la gente que te ha rodeado.
Te apunto que el subconsciente opera a 11.000.000 de bits por segundo frente a los 40 bits por segundo de la mente consciente. Es decir, tu subconsciente procesa y conoce muchísima más información de lo que está frente a ti de lo que podrías ni tan siquiera imaginar.
Se las ingeniará para conseguir su propósito de ponerte esa realidad ante ti, y en el caso de que seas mujer, entre cien hombres en una cafetería, sabrá encontrar a aquel cuyos gestos, mirada, tono de voz, posturas o frecuencia vibracional, guarde alguna similitud con tu padre y cuando no te hayas dado ni cuenta, ese hombre estará encandilándote con sus juegos de malabares para que caigas rendida en sus brazos.
Pero no, no creas que su subconsciente está procurando traerte ningún mal, todo lo contrario. No te acerca al maltratador porque merezcas sufrir.
Simplemente tu subconsciente entiende que tu padre es la figura que te enseña a sobrevivir y te protege, así que procurará traer de nuevo a ese padre representado en tu pareja con el fin de que cuide de ti. No revisa si fue un padre bueno o malo y si es interesante para ti traer de nuevo a tu vida ese perfil.
El subconsciente no distingue esa experiencia, no está preparado para nuestra felicidad, solo para nuestra supervivencia.
UN CEREBRO SIN ACTUALIZAR
¿Y a qué se debe este comportamiento de la mente, teniendo en cuenta que atraer a ese tipo de hombre en realidad pone en peligro la vida de esas mujeres?
Esta paradoja se resuelve comprendiendo algo muy básico. Nuestro cerebro aún vive en la prehistoria. En la época de las cavernas como suelo decir a menudo.
El ser humano ha evolucionado demasiado rápido en los últimos cientos o incluso miles de años. Hace tan solo 3.500 años que se inventó la rueda, y parecen muchos, pero si lo comparamos con los cerca de 6.000.000 de años que hace que el primer homínido pobló la tierra, te das cuenta de que el ser humano contemporáneo es tan solo un chasquido de dedos, un segundo en la línea de tiempo desde que vamos sobre dos piernas.
Nuestro cerebro ha vivido durante demasiado tiempo cuidándose de sobrevivir ante los elementos hostiles de su día a día; insectos y bestias, inclemencias climatológicas, enfermedad o incluso ataques de otras tribus.
No podemos esperar que en un período tan corto de tiempo nuestro cerebro se haya adaptado a un cambio tan repentino y en lugar de procurarnos la supervivencia, ahora que ya la tenemos prácticamente garantizada, abandone el estado de alerta y ponga el foco en la felicidad. Demasiado pedir.
Es por esta razón que nuestro cerebro busca al padre en caso de las mujeres. Él es de quien se supone que has aprendido a sobrevivir y te protege. Y a la madre en caso de los hombres, que al suponerse estos (en aquel entonces) más capaces de sobrevivir, pretenden el alimento de la madre (lactancia) o su protección afectiva.
Aquí te comparto el primer capítulo de la serie “Evolución interior” de Gaia.com donde el Dr Bruce Lipton explica los misterios de nuestra mente subconsciente y su evolución en el tiempo
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Durante los primeros siete años de vida nuestro subconsciente se está formando y todo lo que ocurre en nuestro entorno, es grabado constituyendo el programa mental de creencias que reproduciremos el resto de nuestra vida de forma automática afectando a nuestros pensamientos, emociones y comportamientos.
Esa información que hace millones de años grabábamos en esos primeros años de vida, nos era muy útil porque en esas partes primigenias de nuestro cerebro, el llamado reptiliano, gracias a las distintas experiencias vividas, se fueron almacenando los recursos necesarios para salir airosos de las situaciones comprometidas a las que nos veríamos expuestos de nuevo en adelante; respuestas de huida, ataque o paralizarse.
Hoy en día, este mecanismo arcaico ya no nos es tan necesario. Sin embargo, nuestro subconsciente sigue buscando a nuestros progenitores entre las distintas parejas que podemos atraer. Si nuestro padre o madre fueron personas que ejercieron un refuerzo positivo y nos colmaron de amor, atraerá con frecuencia eso mismo.
Si nuestros padres no nos dieron amor, o la herida de abandono está impresa en nosotros, es muy habitual que nuestra pareja también nos abandone de distintas maneras; alta de amor y respeto, infidelidades, manipulación, maltrato, rupturas. Y si además nuestra madre en su necesidad de amor transigía con toda la tiranía de su marido, muy probablemente también reproducirás ese rol.
CAMBIAR EL PATRÓN
¿De qué manera puedo romper el patrón y evitar que vuelva a reproducirse en mi vida esta situación?
El perdón, producto de una compasión consciente y de la comprensión, ayudarán a que, en adelante, esa tendencia inconsciente hacia una persona que te dañe, se transforme.
Cuando veas a tu padre o madre desde el amor, considerando que esa persona arrastra sus propias heridas y que posiblemente el mismo trato que te dio, o mucho peor, le fue dado a él o a ella, y que su programa mental, su ignorancia y su dolor le impidieran ser mejor, habrás convertido en tu mente la imagen monstruosa de tu progenitor, en una figura más amable.
Ese acto de sanación con ese padre o madre construirá poco a poco en tu mente subconsciente una foto mucho más deseable de esa persona que tu subconsciente procurará atraer de nuevo para tu supervivencia como pareja.
Digamos que el ejercicio consistiría en dibujar de nuevo una versión más amable de tu padre o madre en tu mente para que sea ese perfil el que tu mente atraiga en adelante.
Lava, mediante la consciencia y el perdón, la imagen que en tu subconsciente se guarda de tu padre o madre para que lo que venga en adelante, sean personas acordes a ese nuevo patrón deseable.
Y puedes hacerlo por ti misma o mismo sin falta de hacer terapia. Dedica tiempo cada noche a dibujar esa realidad en tu mente, y emociónate con ella, antes justo de acostarte, unos minutos para el perdón, para la comprensión y la compasión. Y abraza a tus padres como si hubieran sido lo buenos padres que tú hubieras deseado.
Seguro que, si hubieran podido, te hubieran tratado con amor, pero no lo tenían dentro, probablemente solo tenían heridas que en ocasiones ni siquiera tú conoces.
Es un ejercicio muy liberador, y, sobre todo, muy práctico para moldear nuestro programa mental subconsciente y cambiar el patrón que se reproduce.
Comprende desde la compasión y perdona desde el amor, y estará naciendo en ti una nueva vida.
El Yoga que promueve la consciencia
¿Qué es Kundalini Yoga? ¿Cuál es la diferencia entre este estilo de Yoga y otros?
Son dos cosas que me preguntan con mucha frecuencia.
Kundalini Yoga es el Yoga que promueve la consciencia.
Kundalini significa “el rizo del cabello del Amado”. El amado es Dios, y el rizo de su cabello es la energía potencial que tenemos todos los seres humanos, y que llamamos Kundalini.
Entonces, con la activación de esta energía mediante prácticas físicas, mentales y espirituales, mediante la estabilización de su flujo y la capacidad de ponerla a disponibilidad de todo nuestro ser, podemos experimentar dentro de nosotros esa sensación de unidad y plenitud constante y consciente que muchas personas llaman Dios, o la Divinidad. Puedes llamarle como resuene en ti, lo importante no es cómo le nombres, sino que sepas que tú también puedes experimentarlo ese estado a través de ésta práctica.
En Kundalini Yoga se combinan el conocimiento de los 8 pilares de la tradición milenaria en los que se sustentan los diferentes tipos de Yoga y que derivan en posturas, control de la respiración, disciplina, edificación de carácter, dominio de los sentidos, concentración, meditación y estados de consciencia.
Te compartimos el trailer de “Abre el corazón al presente” con Mukhia Shanti Kaur
Ésta práctica combina pranayama con mantras con la intención de expandir la energía verde, con variedad de kriyas para la relajación del corazón, y la expansión de los pulmones. Establece la confianza en el presente con gratitud y facilita el flujo de la prosperidad y las oportunidades.
Ya disponible en Gaia
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En una clase de Kundalini Yoga se trabaja cuerpo, mente y alma; se combinan ejercicios de trabajo físico con técnicas de respiración, mantras y meditación que nos permitan observar el estado de fragmentación interno en que vivimos, que nos lleva a comportarnos de formas que nos dañan y, paso a paso, con la aplicación de la técnica, vamos adquiriendo libertad para actuar desde la consciencia de nuestro ser, libres de nuestras ataduras de patrones traumáticos, familiares y culturales.
Libertad, seguridad y autonomía para expresar nuestra Alma es lo que ganamos con Kundalini Yoga. Yogi Bhajan llegó al continente americano en 1969 a enseñar estas técnicas ancestrales en una combinación única creada por él que es el estilo de Yoga que hoy se conoce en occidente como Kundalini Yoga.
A través de esta práctica podemos desarrollar:
. Buena salud
. Sistema inmunológico poderoso
. Nervios resistentes
. Capacidad de resiliencia
. Fortaleza física
. Seguridad personal
. Buena actitud para afrontar los desafíos de la vida
. Concentración y enfoque
. Actitud de gratitud
. Capacidad de servir y ayudar
. Energía vital
. Mejor relación con la mente
. Tranquilidad interior
. Alegría de vivir
Lo que Kundalini Yoga ha hecho (y sigue haciendo) por mi es invaluable, por eso comparto estas prácticas, porque han transformado mi vida de una forma extraordinaria, trayendo a mi existencia enfoque, claridad, sensación de pertenencia y propósito y una conexión muy profunda con la noción de que todo en esta vida es sagrado.
Me resulta complejo poner en palabras lo que experimento, porque Kundalini Yoga es, fundamentalmente, una experiencia. Si quieres conocer de qué se trata, lo mejor es practicar la técnica y tener tu experiencia de ti mismo a través de ella.
¡Que tu práctica sea fructífera y que te lleve a vivir en el paraíso dentro de ti!
Con mucho cariño, Mukhia Shanti Kaur
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En ésta práctica ya disponible en Gaia se activa la circulación en la espalda y abdomen bajo con la combinación de potentes ejercicios físicos y pranayama. Para activar el segundo y ayudarte a lograr un equilibrio emocional.