Esta noche es Nochebuena…
Esta noche es Nochebuena…
By: Carla Sanchez | Dec. 24, 2015
¿Sabías que las calorías que suelen ingerirse en la cena de Nochebuena equivalen a las de todo un día comiendo? así de excesivo se pone el panorama en las comilonas señaladas en las fiestas navideñas, la gula nos hace superar con creces y de forma repetida las necesidades energéticas de nuestro cuerpo.
La estadística es bastante divertida, ya que la mayor parte de la gente cree que subirá como mucho 1kg, pero la realidad se traduce en que los españoles engordaremos una media de 3kg a base de dulces, grasas y muchos brindis durante estos días.
Si este año quieres evitar añadir kilos al cuerpo, tal vez deberías parar a reflexionar en el por qué de semejante empacho y empezar a buscar una alternativa más equilibrada en todos los sentidos:
– Alimentos más sanos y ligeros.
– Dulces con menos azúcar.
– Poner más conciencia en las cantidades de comida que meteremos en el estómago.
¿Cual es plan para no excedernos? ahí van algunas sugerencias.
– Cenar más temprano es una buena manera de ayudar al aparato digestivo a lidiar con la sobrecarga, si la hay. En lugar de empezar a comer a las diez de la noche, adelantar la cena dos horas será una ventaja y además podrás disfrutar de más tiempo con los tuyos.
– Tenemos tendencia a cocinar de más en Navidad. En lugar de ceñirnos a la ración adecuada que necesita una persona, guisamos el doble y la tentación de repetir es irresistible. Si evitamos hacer más comida de la que se debe comer, será mucho más fácil no pasarse de la raya.
– Otra máxima navideña es servir un menú calórico como parte del ritual. Podemos ser más moderados aportando creatividad en la mesa y buscando inspiración en la cocina internacional, por ejemplo la comida asiática, sabrosa y mucho más ligera, o un menú vegetariano, que sin duda será toda una novedad.
– Alargar la hora de ir a dormir es una gran estrategia para poder digerir mejor la cena. Eso propicia también un buen momento para jugar a algo, o charlar tranquilamente con tus invitados, tu familia, y en definitiva compartir, que es de lo que va la cosa.
– Y el 25 ¡siempre puedes empezar el día de Navidad con una súper práctica de yoga mañanera quemagrasas! En Aomm.tv tenemos un menú de lo más sabroso y variado, y las creamos con mucho amor para ti.
Por último compartiré el menú que haremos en mi casa este año, vegetariano y sencillo:
– De primero crema de calabaza con batata.
– Para acompañar, alguna ensalada que variamos; este año: escarola, granada, mandarinas, queso feta, nueces y vinagreta de limón y miel.
– Plato fuerte: seitán (proteína de trigo) con castañas, setas y guiso de cebollas al vino.
– Postre: peras bañadas con chocolate negro y crema de avellanas.
– Como extra, algún turrón rico y listo.
¡Feliz Navidad! (sin excesos)
El mejor momento para hacer yoga
Todos nos hemos preguntado alguna vez cuál es el mejor momento para hacer yoga. Está muy recomendado hacerlo por la mañana, pero en realidad cada uno de nosotros tiene un biorritmo diferente, una tendencia a estar más o menos activo a ciertas horas y distintos condicionamientos en la agenda personal.
Analicemos qué nos puede aportar cada momento del día.
Las mañanas:
- Se aconseja practicar por las mañanas porque nos levantamos relajados, con la mente despejada y libre aún de preocupaciones, responsabilidades y listas de cosas por hacer.
- Al alba el bullicio de la ciudad aún no ha comenzado, por lo que también es un momento de mucha calma energética.
- Por las mañanas nos despertamos con el estómago vacío, el cuerpo está más ligero y en buenas condiciones para hacer ejercicio.
- Mover las articulaciones y estirar la musculatura a primera hora te despierta y activa, (es mucho más efectivo y sano que el café).
- Sincronizarte con la salida del sol aporta un extra de fuerza y vitalidad y es una forma fantástica de inaugurar tu día.
El medio día:
- Hay mucha gente que solo dispone de la hora de comer para poder hacer ejercicio. Si ese es tu caso debes hacer yoga antes de tomar el almuerzo.
- Realizar una clase activa nos ayudará a sobrellevar el segundo tramo del día con vigor.
- Una pausa para yoga es una buena manera de romper la rutina y oxigenarnos a todos los niveles.
La tarde, o la noche:
- Es ideal para ayudar a soltar las preocupaciones que se han ido generando.
- La práctica al atardecer es una oportunidad para deshacer la tensión física y mental acumulada tras largas horas de trabajo, cambiando nuestro estado energético.
- En el crepúsculo el ritmo urbano también desciende y se sintoniza mejor con el cuerpo.
- Hacer yoga por la noche es una herramienta eficaz para lograr un descanso más profundo y reparador.
Incidiré en que practicar yoga es sano y positivo en cualquier horario. Sabiendo lo que cada franja te puede aportar, escoge aquel momento que tú sientas que encajará mejor contigo y lo que necesitas.
Y si no lo tienes claro es tan sencillo como probar y decidir desde la experiencia qué te hace sentir mejor.
Es interesante tener presente que hay posturas que nos activan y otras que nos calman, por lo que también hay que escoger bien el tipo de práctica según la hora del día . Puedes orientarte en nuestro catálogo, donde encontrarás clases adecuadas para lograr ambos objetivos.
¡Qué tengas un día estupendo!