Integración de los Principios del Método Pilates
Integración de los Principios del Método Pilates
By: Vicky Timón | May. 18, 2016
La integración y el control de los Principios del Método Pilates
El objetivo final del aprendizaje de los Principios del Método Pilates es integrarlos para poder realizar todos los movimientos de manera controlada. La Integración incluye aprender, practicar y automatizar. De la unión de todos estos aspectos resulta un trabajo físico eficaz, fluido y económico pero no ausente de intensidad, al contrario, quién más atención, intención e interés imprime a la hora de realizar los movimientos según están estipulados, más intensidad consigue de los mismos. Es un trabajo neuromuscular que se basa en mandar órdenes precisas a la musculatura implicada en cada movimiento para conseguir realizar los ejercicios de manera eficaz y controlada.
Este mecanismo ‘cerebro-músculo-articulación’ precisa de una gran fuerza de voluntad y quién consigue concentrarse en ello, percibe los efectos inmediatamente, ya que un ejercicio que podría ser suave y que a la vista lo parece, se convierte en una herramienta terapéutica sofisticada de alto rendimiento y efectos altamente beneficiosos para la salud.
Por tanto, la sistematización de los principios del Método Pilates es fundamental para la consecución del beneficio. Si automatizamos esta forma de trabajar habremos aprendido a actuar de manera posturalmente saludable para toda la vida. No es exagerado decir que, una vez interiorizados los principios, ya no volvemos a ser los mismos porque la percepción de la postura y del movimiento cambian.
Sin los Principios el Método Pilates, este sistema de entrenamiento no tiene sentido, se convertiría en una actividad física más, parecida a la gimnasia de mantenimiento en la que el objetivo es moverse sin ningún fin específico, más que el puro movimiento. No digo que no sea un movimiento válido, lo es, pero Pilates es mucho más y por este motivo los médicos lo están prescribiendo como terapia para diversos dolores y patologías.
A grosso modo, los principios a los que se refiere este artículo son (para ver un desarrollo mas extenso ir al artículo Los Principios del Método Pilates)
1. Articulación cráneo vertebral: colocar, articular y sostener la cabeza en el punto más equilibrado posible respecto de la columna cervical.
2. Estabilización escapular: colocar las escápulas, moderadamente descendidas y centradas, respecto de la columna dorsal.
3. Estabilización pélvica: Buscar un punto medio entre una posición de cadera excesivamente redonda (retroversión) y una posición arqueada (anteversión). En posición tumbada, la zona lumbar quedaría suavemente separada del suelo, mas técnicamente las EIAS (Espinas Iliacas Anterosuperiores) y la sínfisis púbica tendrían que estar paralelas al suelo. Estabilizar la cadera elimina el dolor lumbar y mejora la transferencia de fuerzas hacia la cabeza y hacia los pies. Este punto medio solo se mantendrá con la acción del abdomen, sobre todo con la parte mas profunda del mismo, el músculo transverso abdominal.
4. Elongación axial y conexión abdominal: alargar la columna para evitar presiones innecesarias sobre los discos intervertebrales y utilizar la fuerza de la musculatura abdominal para conseguir que el gesto dure mucho más tiempo. La conexión abdominal también trabaja el uso de la musculatura abdominal desde dentro hacia fuera, para proteger a la zona lumbar durante los movimientos del tronco.
5. Alineación y equilibrio corporal: colocar las piernas, los brazos y la cabeza en su posición más neutra, y utilizar ambas partes del cuerpo, derecha e izquierda, con el mismo rango de movimiento y la misma fuerza.
6. Respiración: inhalar y exhalar moviendo la parrilla costal lateralmente, evitando la presión intra abdominal y protegiendo a la zona lumbar, con la acción de la musculatura abdominal, que permanece todo el tiempo “conectada”.
7. Integración y Control: es el Principio que nos ocupa y que se ha desarrollado ampliamente en este artículo, pues es el resultado de todos los demás cuando se realizan de manera conjunta. En si mismo no tiene pautas, no has de hacer nada especial para llevarlo a cabo y, sin embargo, lo has de hacer todo, todo lo que has aprendido anteriormente. Es el resultado final del aprendizaje, la demostración global de lo que has practicado anteriormente de manera analítica.
Enfocando y calmando la mente
Una de los primeros efectos que notamos cuando incluimos el yoga en nuestra vida, es la sensación de tener más calma mental y un enfoque más claro de nuestros pensamientos. Es como si todo fuese más lento y apreciásemos todo con más profundidad.
No obstante, en la era en la que vivimos, repleta de información, ruido, e inevitables preocupaciones, podemos notar a menudo demasiada actividad mental, cosa que puede afectarnos negativamente a nuestra vida.
El exceso de pensamientos y preocupaciones nos quitan “prana” o energía vital.
A parte de una práctica continuada de meditación, es fundamental prestarle atención a nuestra alimentación y a nuestro estilo de vida.
Desde mi experiencia, he podido notar innumerables veces, que según los alimentos que he ingerido luego mi meditación y mi estado mental se ha visto afectado.