Posturas de yoga: Prasarita Padottanasana

Posturas de yoga: Prasarita Padottanasana
Por: Gaia | Feb. 07, 2014
Prasarita quiere decir abierto, extendido y pada significa pie. Esta es una postura de flexión anterior y al mismo tiempo una postura invertida.
TÉCNICA
- De pie sobre la esterilla, separa los pies entre 1,20 – 1,50 metros, dependiendo de la longitud de tus piernas. Debes separarlos todo lo que puedas sin llegar a sentir dolor; una mayor apertura de tus piernas facilitará la pose final. Las puntas de los pies miran hacia el frente.
- Apoya las manos en las caderas, relaja los hombros, y alarga tu columna vertebral como si quisieras crecer unos centímetros.
- Toma una inhalación, y al exhalar, desciende lentamente el tronco realizando la flexión desde la cadera. Apoya las palmas de las manos en el suelo, separadas a una distancia equivalente al ancho de tus hombros, y en la misma línea imaginaria que va de un pie al otro.
- Vuelve a inhalar y levanta la cabeza mirando hacia el frente. Intenta hundir los riñones y formar una concavidad en la espalda.
- Al exhalar desciende de nuevo, hasta apoyar la cabeza entre las manos.
- Mantén la postura entre medio y un minuto, respirando con regularidad y forzando la exhalación, ayudado de los músculos del abdomen.
- Inhalando vuelve arriba lentamente, junta los pies y descansa.
RECOMENDACIONES
- Practica esta postura sin calcetines y sobre una superficie antideslizante, para evitar que los pies se deslicen en la postura final, lo que podría suponer una lesión en los músculos aductores (cara interior del muslo).
- Para facilitar que la cabeza llegue hasta el suelo, separa las piernas lo máximo que puedas, siempre que no llegues a sentir dolor.
- Es posible que al principio no puedas poner la cabeza en el suelo o las manos en línea con los pies. En este caso, sitúa las manos un poco por delante de la línea imaginaria. También puedes situar un bloque bajo la cabeza para apoyarla en él, aunque no pasa nada porque quede suspendida en el aire.
- Mantén las rodillas bien estiradas para aprovechar el intenso estiramiento que brinda esta asana.
- Una vez que hayas adoptado la pose final, respira profundamente haciendo hincapié en la exhalación.
BENEFICIOS
- Se produce un intenso estiramiento en los músculos de la parte posterior y la cara interna de los muslos (isquiotibiales y aductores).
- Flexibiliza la columna vertebral.
- Aumenta notablemente el riego sanguíneo a la cabeza.
- Se acelera la circulación de la sangre en todo el tronco, favoreciendo el funcionamiento de los órganos de la digestión.
- El nervio ciático es estirado gracias a la extensión de los muslos y liberado en la zona lumbar gracias a la flexión anterior.
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No quiero hacer esa postura de yoga

La asana es una postura de yoga con la que se busca mejorar tu cuerpo y tu mente. Hay diferentes tipos de asanas: de pie, de flexión posterior, flexión anterior, torsiones, posturas de equilibrio, invertidas, de relajación y meditación. Es normal tener preferencias por un tipo según tus características físicas y mentales. Así, hay algunas que practicarías todos los días y hay otras que no practicas voluntariamente.
No quiero hacer esa postura de yoga
Todos hemos tenido alguna vez una asana que no nos gusta y que nos produce rechazo.
Cuando nuestro profesor nos indica su práctica, mentalmente nos quejamos y deseamos que pase rápido. Durante los siguientes minutos resoplamos y miramos a los compañeros que muestran un excelente dominio de la postura que nosotros no tenemos mientras nos tiemblan los músculos.
Pues esa es la postura que más hemos de practicar. Cuando mental y físicamente rechazamos una asana es de la que más podemos aprender.
Debemos preguntarnos:
- ¿Por qué no me gusta esta postura?
- ¿Contra qué estoy luchando?
- ¿Tengo una dificultad física real o mental?