Yoga ahora, que tu cuerpo sea tu maestro
Dentro de la colaboración que hacemos mensualmente con la revista Yoga Journal, se encuentra este artículo escrito por nuestro profesor Mario Silva sobre una de las prácticas de Yoga Dinámico que Mario guia. Práctica que puedes disfrutar en este enlace.
Yoga Ahora, que tu cuerpo sea tu maestro
Para vivir plenamente el presente, ya sea preparando el desayuno, en la ducha, hablando con un amigo o en la práctica de yoga en la esterilla, el cuerpo es la clave para acceder al AHORA. A través del cuerpo y su escucha podemos acceder a un profundo conocimiento de nosotros mismos, allí donde la mente con sus ideas, juicios o proyecciones difícilmente puede llegar.
Esta secuencia de Yoga Dinámico es una invitación a acercarnos a la esterilla sin expectativas para poder abrazar el ahora, tal cual se da en el momento presente, dándonos cuenta de la disponibilidad del cuerpo y la mente; en definitiva, se trata de hacernos cargo de nuestra propia práctica a través de la experiencia directa.
Como sentido de orientación, invitamos a que cada practicante adapte las posturas y su duración, cambie las secuencias una vez aprendidas y se apoye decididamente en la indagación y auto observación, de tal forma que la práctica brote desde el aquí y el ahora más que desde la especulación mental.
La serie se desarrolla a través de sencillos movimientos repetitivos (ullolas y vinyasas) para explorar en profundidad cómo alargar y ensanchar pies, manos, brazos, piernas y columna vertebral de tal forma que las sensaciones puedan ayudarte a reconocer la calidad en consciencia de tu práctica.
Durante la sesión se invita a reconocer las sensaciones, sobre todo en las zonas más delicadas como cuello y zona lumbar, para que éstas se suavicen y se tornen silenciosas. Para ello, cada alargamiento y ensanchamiento, de manera paciente y continuada, será poco a poco más refinado, sutil y preciso, respetando tus límites, adaptando los tiempos, escuchando lo que dicen tus rodillas, muñecas, hombros…Dándote cuenta, al fin y al cabo, que fuerza y flexibilidad no son relevantes en el yoga.
La repetición de posturas como Balasana (postura del bebé), Hastabalasana (a gatas) o Adho mukha Svanasana (perro boca abajo), nos llevará, entre otros vinyasas y ullolas, a abrir nuevos caminos neuromusculares y una sensibilidad perceptiva especial que, como proceso de auto indagación sincera y honesta, irá revelando aspectos clave del yoga: suavidad, ligereza, mínimo esfuerzo muscular, concentración y ecuanimidad, permitiendo y aceptando todo lo que acontezca, sea o no de nuestro agrado.
Es importante recordar que el cuerpo es nuestro instrumento. Accediendo a él a través de la auto indagación y la consciencia, el trabajo postural cobra verdadera relevancia. Así como un músico comienza por aprender las notas más sencillas y simples antes de acceder a partituras más complejas, el método de Yoga Dinámico nos invita a sentir el cuerpo, a suavizar y silenciar las articulaciones, a darnos cuenta de lo que está sucediendo para que se revelen aspectos sutiles de nuestro Ser: gozo, unidad, quietud, pertenencia, silencio…
Por último, señalar que para profundizar en el yoga no necesitas otra cosa que lo que ya tienes: cuerpo, mente y consciencia. Por ello, el yoga es accesible a todos y como ciencia milenaria, se mantiene más vigente y más viva que nunca.
La importancia de una buena esterilla de yoga
La esterilla o Mat de yoga, su nombre en inglés, es la herramienta principal que requieres para favorecer una práctica plena, agradable y segura. Cuando no se conoce la materia es fácil caer en el pensamiento de que cualquier antideslizante servirá y esto puede ser un verdadero desacierto. Aspectos como el grosor y la textura marcan la diferencia con respecto a otras colchonetas empleadas en el ejercicio físico pero, además de sus cualidades técnicas, es mucho más que un simple utensilio funcional.
No hay nada más simbólico en la práctica contemporánea del yoga que el mat en sí. Tu experiencia sobre la esterilla es una metáfora de tu aprendizaje en la vida representada como un espacio personal, íntimo y único donde se escenifican las vivencias mentales y emocionales a través de la oportunidad que la práctica ofrece de deshacer la tensión, el estrés, y caos que envuelve nuestra existencia humana. La esterilla te invita a estar en “ el ahora” sin importar los sucesos pasados, o lo que ocurrirá después, sobre ella solo sucede el momento presente en el que estás tú, con tu respiración, tu ritmo, tus límites y tu intención.
Los aspectos más importantes a tener en cuenta a la hora de escoger una esterilla de yoga son:
Tamaño – grosor – tracción
Tamaño
La esterilla estándar mide entre 60 cm de ancho por 173cm de largo , hay un margen mínimo de variación según la marca. Aunque pueda parecer pequeña y estrecha lo cierto es que no se necesita mucho más espacio, la práctica de yoga también está vinculada con el contacto con la tierra y es interesante explorar el movimiento en este marco.
Grosor
La comodidad de un mat es fundamental. Sentir el suelo duro y frío es desagradable, así que por un lado debe ser aislante y por otro tener un grosor que brinde apoyos amables en las distintas posturas.
Los hay de 2, 4 y 6 milímetros, dependerá de tus gustos y la sensibilidad a la dureza que tengas. Hay personas que prefieren esterillas muy finas porque son más estables; yo por ejemplo me inclino a la de 6 mm porque el contacto de rodillas o codos con el suelo me resulta molesto cuando hay poca densidad, sin embargo, ese grosor suele parecerme inestable en ciertos equilibrios y prefiero hacerlos directamente fuera de ella para tener una base más firme.
Dependiendo del material será más ligera o pesada, valora en función de tu estilo de vida si ésto será molesto a la hora de desplazarte con ella, o si merece la pena. Hay quien practica siempre en casa por lo que el peso no es un problema; en los estudios de yoga suelen dar lo opción de dejarla allí para mayor comodidad. Si eres una persona que viaja mucho te conviene un modelo más ligero y adaptable para no añadir más carga a la maleta.
Tracción
Resbalar en una esterilla de mala calidad es un clásico y, lejos de ayudar, dificulta la ejecución de asanas. La tracción está relacionada también con la seguridad, cuanto más estable es el material más seguro te sentirás a la hora de avanzar en las posturas.
Mi recomendación es que pruebes el mat antes de comprarlo. Hay texturas muy diferentes, cerciórate de que tus manos no se resbalan y tienes buena adherencia. Algunas personas sudan mucho en pies y manos, si es tu caso consulta en la tienda, hay materiales pensados para compensar ese problema.
Si tienes en cuenta estas recomendaciones podrás adquirir una esterilla buena, duradera y que hará de tu práctica una experiencia muy gratificante. Que el bolsillo no te frene, el precio medio de un mat de calidad oscila entre los 40 y los 80 euros, dinero que vale la pena invertir, porque rentabilizarás la compra con creces.
Por último, te animo a hacerte con una esterilla de materiales ecológicos. Ser respetuosos con el medio ambiente sintoniza con la filosofía del yoga y es un gesto de conciencia.
¡Feliz compra! Namaste.