Poses de pie
¿Si te has preguntado alguna vez por qué deberías practicar la postura del arco de pie? Has llegado al lugar correcto. Estas posturas no sólo te mantienen de pie, sino que pueden proporcionarte una base sólida para el resto de tu práctica. Al crear un plano desde la base, las posturas de pie imprimen tu cuerpo espacialmente, proporcionándole una retroalimentación instantánea. Muchas posturas de pie también te piden que trabajes el equilibrio al ponerte sobre un solo pie. Además, uno de los mayores beneficios de estas posturas es la mejora de la fuerza del núcleo. Dado que tu núcleo es necesario para estabilizar la columna vertebral en todas las posturas de pie, la incorporación de estas posturas en tu rutina diaria te proporcionará fuerza funcional – del tipo que mantendrá tu postura en buen estado, de la mañana a la noche.
Cuando se hacen con conciencia, las posturas de pie te enseñan a estabilizar tu núcleo de forma saludable y sostenible. Desde la postura de la montaña (tadasana) hasta la postura del canguro (utthita hasta padangusthasana), Si te centras en el modo en que todo el cuerpo trabaja en conjunto para mantenerte en la alineación adecuada, obtendrás una nueva apreciación de esta categoría de posturas. Cuando practiques, empieza por la base -los pies- y luego sube hasta la coronilla. Presta atención a cada grupo muscular, notando cómo se mueve la energía. Si mantienes todo el cuerpo activo, no sólo las piernas, transformarás tus posturas de pie y darás nueva vida a tu práctica.
La belleza de las posturas de pie es que incorporan todas las acciones principales necesarias para un cuerpo sano, desde los giros de la columna vertebral hasta los pliegues hacia delante. Si te familiarizas con estas posturas y encuentras la manera de incorporarlas a tu práctica diaria, disfrutarás de un cuerpo sano, fuerte, cómodo y a gusto con el equilibrio.
¿Cuáles son las mejores posturas de yoga para un principiante?
Tadasana la belleza de las posturas de pie es que incorporan todas las acciones principales necesarias para un cuerpo sano, desde los giros de la columna vertebral hasta los pliegues hacia delante. Si te familiarizas con estas posturas y encuentras la manera de incorporarlas a tu práctica diaria, disfrutarás de un cuerpo sano, fuerte, cómodo y a gusto con el equilibrio. (virabhadrasana I y virabhadrasana II) es otra forma inteligente de iniciar tu educación en yoga. Estas posturas se utilizan comúnmente en las clases y secuencias de yoga, y son una gran manera de fortalecer todo el cuerpo. A muchos estudiantes también les encanta la forma en que la postura del triángulo (trikonasana) se siente en el cuerpo porque fortalece y estira al mismo tiempo.